
Conversamos con Aurelio García, experto en el sector Retail de Valliance Real Estate sobre los efectos de la pandemia en este sector y las expectativas de futuro.
Las proyecciones de inversión para el retail en 2021, en medio de la pandemia y el crecimiento de interés por la logística y el sector residencial
A estas alturas del año es complicado poder hacer un pronóstico exacto del volumen de inversión en retail de cara a estos próximos meses. Es posible que la tendencia sea similar a la del año anterior, teniendo en cuenta que continuamos experimentando una gran incertidumbre en el mercado y la economía, con un gap muy importante entre compradores y vendedores
¿Cuáles son los principales motores de inversión para el retail?
El mercado necesita reajustarse y hasta que ese ajuste no tenga lugar, vamos a estar ante un sector muy restrictivo en cuanto a la entrada de inversores. Salvo operaciones puntuales, se seguirá la tendencia de este 2020
¿Qué zonas se han visto más afectadas por los efectos de la pandemia?
Se ha acelerado una tendencia que ya se estaba produciendo antes de la crisis sanitaria: la polarización del sector. Es probable que experimentemos un refuerzo del valor en aquellas ubicaciones privilegiadas o prime y una devaluación de las zonas secundarias.
¿Cuál consideras que es el futuro del lujo en España por la falta de turistas extranjeros para comprar?
El lujo es un sector resiliente, especialmente en España, que se había establecido en los últimos años no solo como destino vacacional, sino como un destino de compras en crecimiento. Para algunos segmentos del mercado las dificultades del momento serán más circunstanciales que para otros y el lujo, con adaptaciones, seguirá siendo un sector potente y con un futuro prometedor en España
¿Cuál crees que es el impacto de la reducción del ticket medio de los compradores a consecuencia de la pandemia?
La energía no desaparece, se transforma. Este fenómeno también ocurre en este sector del retail en revisión al que nos enfrentamos. La omnicanalidad obliga a la revisión continua y readaptación de los modelos de negocios con la ayuda de la ingeniería de datos. La palabra crisis significa “cambio brusco” y aunque a todos nos gustaría seguir con nuestra vida de una manera “relativamente normal”, la realidad está obliagando a las compañías a reinventarse y adaptarse. Es cierto que, por prudencia y sentido común, el índice de ahorro de las familias se ha disparado y el enfoque a productos de primera necesidad ha potenciado las operaciones de inversión en el sector supermercados. Sin embargo, cabe destacar que esta es una reacción lógica y que irá evolucionando conforme evolucione la crisis sanitaria, la situación política y económica.